martes, abril 29, 2008

Recordatorio

Sé que no hace falta que se lo recuerde, pero bueh, así somos en esta casa: esta tarde, a las 19 horas (que son las siete) en el Ámbito Cultural de El Corte Inglés sito en Serrano 52, Madrid, se presenta la novela de Rebeca Rus, nuestra Rebeca, Sabrina 1 El mundo 0.

Y nada que vayáis, que se os espera.

Y una foto de una tía maciza para rellenar:


Eh, que viene a cuento. ¿Qué lleva tatuado la chica entre la teta y el brazo? Eso es, el comienzo del capítulo 3 de Sabrina 1 El mundo 0.

viernes, abril 25, 2008

Facebook

Así a bote pronto es una idea estupenda: una comunidad en la que los amigos forman una red para compartir fotos, vídeos, noticias, chistes, chascarrillos y estados de ánimo. Una manera fácil de que todos esos amigos con los que es difícil comunicarse habitualmente (por ejemplo, porque se hayan ido a trabajar a Estados Unidos) estén en contacto y sepan unos de otros. Poco esfuerzo, basta que hagas cualquier cosa en el Facebook y toda tu red de contactos se entera. Comodísimo.

Pero igual que Internet se usa esencialmente para buscar fotos de Britney Spears (antes para ver lo buena que estaba, ahora para ver lo bajo que ha caído) y no para aprender microelectrónica, Facebook se ha convertido rápidamente en un refugio de tests chorras y gracietas sin gracia. Hasta tal punto que ha surgido rápidamente un grupo de críticos, como se puede ver en este descacharrante vídeo (descacharrante si llevas más de dos semanas con Facebook):



Tres millones y medio de visitas largas en YouTube, se conoce que no soy el único en estar ya un poco cansadito del invento este (Nota: ¿cansado de versiones de We didn't start the fire? Bueno, pues un poco también).

Lo curioso de este video es que su método de expansión natural es precisamente... Facebook. Lo he recibido ya dos veces en tres días via Facebook (gracias, Esther, gracias, Attila), y ha logrado que volviera a meterme y a agregar contactos como un loco o un adolescente. De momento la fiebre es leve, hasta que alguien me haga cosquillas virtuales o me mande un test sobre Qué Color Soy o intente que me apunte al Grupo Odiamos los Tenedores de Tres Púas. Entonces recordaré por qué en realidad no me gusta estar en contacto con la gente y por qué me hice yo misántropo.

Dijo Mister Scrooge.

lunes, abril 21, 2008

De aquí a ocho días

O siete, si lo veis mañana, que a estas horas de postear... El martes 29, en cualquier caso. Gran presentación en sociedad de ese libro que tenemos en promoción porque nos parece lo mejor que se ha escrito en los últimos quinientos años:


Este, sí.

Están ustedes invitados al acto de presentación, que será en Madrid, en la sala de Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Serrano, sita en la propia calle de Serrano número 52. La cosa empezará a las 19.00 con la presencia de la autora, bien conocida en esta casa, y de la subdirectora de la revista Glamour, Carmen Garijo.

Rebeca está ya preparando unas gracietas para hacerles de reír a base de bien, y parece que es posible que haya cosas de comer y de beber, así que asistan si pueden, que no se arrepentirán. Rus firmará cuanto libro le lleven para firmar, incluyendo los de Ken Follet, y por mi parte he ensayado un número artístico para amenizar los tiempos muertos de la presentación si los hubiere.

Estoy muy orgulloso de él, aquí estoy en uno de los ensayos:




Vamos, si no vienen ustedes a pesar de esta impresionante oferta es que tienen pelos en el corazón.

domingo, abril 13, 2008

Más anuncios hechos en esta santa casa

Ya saben ustedes por veces anteriores que los procesos para realizar anuncios son más dolorosos de lo que parece desde fuera del negocio, y este caso no ha sido una excepción. Creo que he envejecido un año a causa de estos dos anuncios:





Díganme ustedes si la pérdida de pelo, el abandono del cerdo agridulce, el rictus chungo y la creciente úlcera han merecido la pena, por favor.

miércoles, abril 09, 2008

Otra de pelis

He aquí la lista de ingredientes para hacer una película maravillosa: una B.S.O. con varios premios Grammy y los artistas del momento, una joven y bella actriz en la cumbre de su carrera justo tras haber hecho el peliculón de su vida, el mítico Gene Kelly, lo último en efectos especiales del momento y un chorro de números musicales curradísimos con cienes de bailarines, lo último en moda, música y variedades, otro buen chorro de pasta para contratar a los mejores profesionales...

Es difícil que la cosa vaya mal.

O que tengas mala suerte y te salga Xanadú.



Y eso es lo que vi ayer en el salón de mi casa. Para los que aún os estáis riendo, parad, por favor. Todos tenemos nuestras debilidades. Y la mía es Olivia Newton John. Con los años he aprendido a no avergonzarme de ello y reconozco que tengo todas sus canciones (menos las de country, argggg) grabadas en mi mente y corazón. Como estoy de ama de casa y a mi hija le da por dormir en los momentos más insospechados, le dije a Chiqui que me la consiguiera como fuera. Tenía el vago recuerdo de haberla visto hacía años.

Ahora sé porque mi mente hizo el esfuerzo de olvidarla. Fue autodefensa.

Xanadú es una película terrible (fue una de las máximas ganadoras de galardones en la gala de los Golden Raspberry "Razzie" Awards de aquel año, 1980), pero, además, Xanadú es una película que ha envejecido fatal. Muy mal. Que te cagas de super-mal. ¿Las razones? Buff... a ver:

1.- Esas cortinillas entre escena y escena. Madre del Amor Hermoso. Son tan terribles que a la tercera vez que las ves te pones a llorar gimiendo "basta, basta". Además, el montador se empeña en usarlas una y otra vez, cambiando de estilo en cada momento. Lo dicho, terrible. La cortinilla de estrella es lo más sencillo que encontraréis.

2.- Las luces de neón y los efectos especiales tipo Tron, pero en peor. Todo es fluorescente, brillante, recargado y salido de madre. Ya sé, la peli es de 1980. Fue una década difícil. Pero eso no es una excusa para abusar, ¿no? Cada vez que Olivia aparece en la pantalla como musa rodeada de luz de neón, parece la hermana muerta de Obi Wan Kenobi. Arggg.

3.- Los números musicales, largos, excesivos, aburridos, dantescos, donde se mezclan bailarines con estética de los años 80 (¿he dicho ya que fue una década terrible?) con malabaristas, contorsionistas, actores de cine mudo, las churras con las m... pero, ¡por Dios! si hasta hay mimos. ¡Mimos! ¡MIMOS! No exagero ni un pelo. Es todo tan exagerado, tan rebuscado, tan complicado que da la impresión de que los actores van por un lado y la peli por otro, de que los bailarines están ahí y no escuchan la banda sonora que, por otro lado, es magnífica con la E.L.O. como protagonista principal. He aquí un claro ejemplo de lo que os estoy contando:



4.- En general, toda la estética de la película. Tan excesiva como los primeros años de los 80 y una clara muestra de la Cumbre del Mal Gusto que invadió, primero a América y más tarde al resto del mundo. Una década terrible, he dicho.

Vamos, que es una película que ha envejecido terriblemente mal. De las peores que yo recuerdo (si recordáis alguna que haya envejecido peor, estáis invitados a compartirla en los comentarios), pero ese que además es mala con alevosía y premeditación. ¿El principal culpable? Un guión sin pies ni cabeza que salta de un lado a otro sin ninguna razón en particular. Los números musicales están metidos a capón y sin venir a cuento y cada uno parece de su padre y de su madre. Hay maniquís que se transforman en personas en realidad. El tío que maneja la máquina de niebla probablemente fuera el que más trabajara y cobrara en todo el film... Michael Beck, el actor que interpreta al protagonista masculino, un frustrado artista que ha perdido la inspiración (sabemos que está frustrado porque al empezar la peli mira una de sus últimas creaciones y la rasga en miles de trozos que tira por la ventana, por supuesto. ¿Qué otra manera hay de interpretar que alguien está frustrado?), es malo, malo, malo. Olivia Newton John es su co-partner perfecta, con una cara de cartón similar a la del actor, lo mismo está enamorada, que triste, que contenta, que sorprendida, que te dice, sin levantar la ceja, que es una musa venida desde el Monte Olimpo y que Dios mío, ha roto las reglas y se enamorado y oye tú, qué mala suerte. Y Gene Kelly, el pobre, que te preguntas cómo porras le han convencido para que aparezca por allí y diga todas esas frases tan ramplonas y vacías de contenido. Para colmo de males, el local que se montan es un cruce entre un sitio de conciertos con una disco roller de los años 80. Arf, arf. Todo en Xanadú es incoherente, todo se sucede sin saber por qué. Como, por ejemplo, esta maravillosa escena en la que los protagonistas se besan por primera vez y se transforman en personajes de comic, dibujada por el gran Don Bluth:




Si después de esto, el tipo que hace de Sonny no se da cuenta de que algo raro pasa con esa chica que acaba de conocer es que tiene menos coeficiente intelectual del que ya sospechaba.

Y ¿qué me decís de la escena final? La superación del rocococococococo de los años 80:





En fin, que supongo que Xanadú es una película tan divertida de ver con tres gin-tonics encima como Los Supermaderos o Los Cabezas Huecas. Pero con una banda sonora genial.


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...